Señor que tu luz continúe
guiando mi vida, mi caminar. Dispón mi corazón para continuar siempre en brusquedad,
abre mis oídos, mis ojos, mi corazón.
Que siempre pueda anunciar
vida, esperanza, siendo luz para tantos que esperan de consuelo, de una sonrisa,
de una palabra amiga.
Convierte mi mente y
mi corazón. Que junto a mis hermanas y pueblo que acompaño se fortalezca mi fe,
mi compromiso misionero.
Gracias Señor por tu compañía
y tu presencia que me renueva , restaura, revitaliza, que me invita a vivir la profecía
siendo buena noticia, siendo esperanza, luz, vida.
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